viernes, 21 de marzo de 2014

EL AMOR A LOS PADRES

"Los niños empiezan queriendo a sus padres; cuando crecen los juzgan; a veces, los perdonan" dice Oscar Eilde en una de sus obras. Hay personas que lo hacen pronto, incluso de forma inconsciente, acaso porque han tenido una buena relación y asumen el vínculo con naturalidad; otras necesitan más tiempo, tal vez ayuda o el revulsivo de un acontecimiento que transforme su mirada.

Nuestros padres forman parte de lo que somos. Podemos desear cambiarlos o que hubieran sido diferentes, pero es en la aceptación del vínculo que se tiene con ellos y de que son como son donde reside la posibilidad de asumir y agradecer esa vida que nos han dado, con todas sus consecuencias. Puede que, a su vez, la vida nos obsequie así con un atisbo más certero de quiénes somosy de quiénes son realmente nuestros padres.