lunes, 9 de marzo de 2015

EL VALOR DE SER UNO MISMO

Carl G. Jung dijo en una ocasión que nos pasamos la primera parte de la vida intentando agradar a los demás y la segunda intentando agradarnos a nosotros mismos. La afirmación de ese psiquiatra y psicólogo suizo encierra mucha fuerza puesto que pocas cosas causan tanto sufrimiento como desear ser aquello que no somos. Algunas personas sienten rabia al darse cuenta de cómo generan su propio malestar con algo tan sencillo como no estar bien en su propia piel. Querer a toda costa ser como otra persona para sentirse querido tal vez sea la más terrible de las soluciones.
En esta época de teléfonos móviles se dice que existen dos tipos de personas: iPhone y las personas Samsung. Nada es más doloroso que siendo un iPhone, querer ser un Samsung o al revés. El quid de la cuestión radica en ser capaces de vivir nuestra propia vida más allá de las modas o las convenciones. Se trata de un gran reto. Ser uno mismo para disfrutar de la vida es cuestión que requiere valor, porque el héroe es el que descubre su mundo y se entrega a él con corazón.
Victor Amat (psicólogo)